Dircom ha puesto en marcha la IV edición de los Premios Dircom Ramón del Corral, los galardones que distinguen la excelencia y las buenas prácticas de Comunicación, premiando los mejores proyectos del sector producidos y/o difundidos en España.
En un año tan excepcional como ha sido el 2020, se han revisado las diferentes categorías y apartados para no dejar de acoger, en todos los ámbitos, aquellas iniciativas de comunicación puestas en marcha por empresas y organizaciones.
Un año más, Javier Fernández del Moral, catedrático de Periodismo Especializado de la Universidad Complutense de Madrid, repite como presidente del jurado de estos galardones. Hablamos con él para descubrir las claves que debe tener un proyecto ganador en los Premios Dircom Ramón del Corral 2021.
¡Te recordamos que puedes presentar tu proyecto hasta el próximo 19 de abril! Consulta más información e inscripciones en: https://premios.dircom.org/
2020 ha sido un año muy especial para todos, en el que la Comunicación ha tenido un papel protagonista. ¿Cómo cree que serán los proyectos presentados este año?
La singularidad que aporta el 2020 a la comunicación es uno de los ingredientes fundamentales de las diferencias que encontraremos en las candidaturas de esta edición de los premios. En realidad, se trata de profundizar, cada vez más, en la utilidad y las ventajas que aporta la comunicación a las empresas e instituciones, y unas circunstancias de cambios como las que estamos viviendo, se manifestarán, sin duda, como un factor determinante en la revalorización del instrumento comunicativo.
Los Premios Dircom se han convertido en toda una referencia de la Comunicación Corporativa. ¿Por qué deben las compañías presentar sus mejores proyectos a estos galardones?
La misma formulación de su pregunta lleva implícita la respuesta. Las tres ediciones anteriores han sido una prueba más que suficiente de la evolución creciente de su prestigio. Los premios Ramón del Corral se han convertido ya en una referencia insustituible en el complejo, cambiante y generoso mundo de la comunicación. Por eso cualquier organización, grande o pequeña, ONG, o todas las instituciones públicas del tamaño e importancia que sea, están preparadas y son candidatas para conseguir algún galardón, por haber sido capaces de aplicar de forma eficaz, eficiente, imaginativa, original y ética sus recursos en comunicación.
Muchos participantes se preguntan, ¿qué debe tener un proyecto para resultar vencedor? ¿Cómo se debe presentar la información?
Esa es una excelente pregunta que todo concursante se debe hacer antes de presentar sus opciones. Las bases, precisamente, están redactadas para orientar en ese sentido a los candidatos y mi consejo es que, antes de presentar los proyectos, se lean muy despacio todos los puntos de la convocatoria, las diferentes categorías y que los presenten conforme a las normas. No se trata de pensar solamente en los macroproyectos comunicativos, sino de considerar precisamente lo que destacaba en la respuesta anterior: originalidad, eficacia y eficiencia, profesionalidad, sostenibilidad, ética y deontología, reputación e impacto social. Por eso es importante que, ciñéndose a las categorías propuestas, se respondan a todos los apartados que se recogen en las bases. El jurado valorará especialmente la creatividad, la innovación en cuanto a metodologías, técnicas o herramientas, el uso adecuado del lenguaje y la calidad de los productos comunicativos que se establece con el público al que se dirige el proyecto y también los resultados que se han obtenido con esa acción de comunicación.
¿Por qué es tan necesario abrir estos galardones a otros aspectos de la Comunicación, como la Comunicación Financiera o la Sostenibilidad?
Lo que hemos vivido y estamos todavía viviendo ha sido para la comunicación un auténtico tsunami, que ha hecho cambiar muchos de los planteamientos tradicionales. Se está poniendo de manifiesto la flexibilidad y la enorme cantidad de componentes y variables a las que afecta la comunicación. Se abren así, no solo nuevas categorías en los premios, sino nuevos enfoques que van haciendo de la comunicación una herramienta cada vez más imprescindible.
