El uso cada vez más extendido de la Inteligencia Artificial (IA) en las estrategias de comunicación está produciendo una gran transformación en los procesos de trabajo de esta área. La IA se está utilizando para mejorar la eficiencia operativa, personalizar la comunicación y gestionar de manera proactiva la relación con los diferentes grupos de interés. Esta transformación libera a los profesionales de tareas repetitivas, permitiéndoles enfocarse en interacciones más complejas y de mayor valor añadido. Pero no debemos olvidar que el uso de la IA requiere un enfoque ético y responsable, especialmente en la gestión de datos y la transparencia. Es crucial que las organizaciones se adapten y se formen continuamente en estas tecnologías, entendiendo sus potencialidades pero también sus limitaciones.
LA IA COMO ALIADA EN COMUNICACIÓN
El uso de herramientas de Inteligencia Artificial (IA) en comunicación corporativa está permitiendo a las empresas ofrecer recomendaciones personalizadas a sus audiencias. Según Mónica Valls Remolí, formadora en IA aplicada y desarrollo empresarial, “la IA está transformando la comunicación corporativa de forma realmente fascinante“, permitiendo a las empresas adaptar sus mensajes en tiempo real a las necesidades y respuestas de cada cliente. “Esto no solo mejora significativamente la experiencia del usuario, sino que también proporciona datos valiosos sobre preferencias y tendencias, optimizando así las estrategias de marketing y comunicación”, agrega.
“El verdadero arte está en combinar la eficiencia de la IA con la intuición y la empatía humanas para crear una narrativa de marca coherente y auténtica en cada interacción”
Por su parte, Ramón Castillo, AI creator y Director académico en Barcelona School of Creativity, añade que la IA facilita mucho el trabajo de Comunicación en el ámbito de las imágenes. Una de las grandes ventajas es la creación de fotos, ilustraciones y textos de alta calidad, optimizando los costes y reduciendo los tiempos de ejecución. “La IA está cambiando la manera de trabajar y de pensar, en definitiva, de crear,” destaca Castillo.
En todo este proceso, además, la IA está permitiendo a las organizaciones transformar sus estrategias de comunicación reactivas en otras más proactivas. Valls destaca cómo ayuda en la anticipación de las crisis y también a ajustar campañas en tiempo y forma. “El análisis de sentimientos permite a las organizaciones tomar el pulso de la opinión pública y responder con agilidad”, comenta.
“Esta tecnología tiene el potencial de elevar la coherencia de la estrategia de comunicación de una marca a un nivel sin precedentes. Puede coordinar y alinear mensajes consistentes a través de todos los puntos de interacción, tanto internos como externos”
HABILIDADES Y CONOCIMIENTOS NECESARIOS PARA LOS PROFESIONALES DE LA COMUNICACIÓN
Para aprovechar al máximo estas nuevas herramientas tecnológicas, Mónica Valls enfatiza sobre la importancia de entender cómo funciona la IA y cómo interpretar los datos que genera. “La IA puede ser una gran aliada para generar ideas iniciales o analizar grandes volúmenes de datos, pero la habilidad humana para entender el contexto cultural y emocional será crucial para afinar esas ideas y hacerlas verdaderamente impactantes”, señala, “por eso, la adaptabilidad y el aprendizaje continuos son claves”.
“Las herramientas evolucionan rápidamente y mantenerse al día es esencial para destacar en el campo de la comunicación”
Ramón Castillo coincide en la necesidad de una formación adecuada y específica. “Es necesario que los profesionales de la comunicación adquieran conocimientos con la mayor celeridad posible, enfocándose en la calidad y la idoneidad,” resalta Castillo, sugiriendo que los comunicadores deben dominar la creación de prompts y familiarizarse con herramientas de texto a texto y texto a imagen. Además, para elegir las herramientas adecuadas, el experto recomienda analizar el ámbito de actuación de la compañía y las necesidades de los equipos.
DESAFÍOS ÉTICOS Y REGULATORIOS
Un aspecto crítico en la adopción de la IA es la gestión de los desafíos éticos y regulatorios. Castillo advierte sobre los riesgos asociados con las fake news y los posibles usos fraudulentos de los contenidos generados por IA. “Es necesario tomar precauciones alrededor de todo lo que se refiere a fake news,” subraya. Además, menciona que la adopción de la IA generativa varía según la naturaleza de la organización y sitúa a las empresas tecnológicas a la cabeza de su adopción.
“Desde el punto de vista de la generación de mensajes creo que vamos todavía con mucha cautela y con miedos comprensibles, hasta que no haya una regulación mínima. Hay todavía algunos puntos negros en la IA que aconsejan a las organizaciones ir con pies de plomo”
Valls, por su parte, complementa esta visión y destaca la importancia de la transparencia en el uso de datos. “Cuando trabajamos con herramientas de IA para personalizar mensajes, debemos asegurarnos de ser transparentes sobre cómo se utilizan los datos de los usuarios,” afirma.
EL FUTURO DE LOS DEPARTAMENTOS DE COMUNICACIÓN
El impacto futuro de la IA en los departamentos de Comunicación promete ser (aún más) transformador. Mónica Valls anticipa que pronto veremos “gemelos digitales” de marcas, capaces de interactuar con millones de consumidores a la vez y ofrecer experiencias personalizadas a gran escala. Sin embargo, subraya la importancia de considerar el contexto cultural y regional en la implementación de soluciones basadas en IA.
“Podemos esperar ver cambios significativos en áreas como relaciones públicas, comunicación interna y gestión de crisis, donde la IA proporcionará herramientas más potentes para analizar, predecir y responder a diferentes situaciones comunicativas”
Ramón Castillo complementa esta visión al señalar que la IA asumirá tareas mecánicas y de gestión de datos, mientras que las habilidades humanas, como el sentido común y la creatividad, serán esenciales. “Creo que todo lo que es más genuinamente humano va a ser fundamental en los skills de cualquier profesional,” indica Castillo, sugiriendo que la formación continua y la adaptación estratégica son clave para el éxito futuro.
“El conocimiento siempre es una fuente de tranquilidad y desactiva el miedo”
