El Foro Mujer y Tecnología, organizado por Dircom Comunitat Valenciana y Región de Murcia junto con Verne Technology Group, reunió a tres de las grandes líderes del sector tech en España Nuria Oliver, Chief Scientific Adviser at the Vodafone Institute y miembro fundador de ELLIS, Susana Duran, VP of Digital Experiences at Sage, y Carolina Castillo, directora de Partners de Microsoft España, para hablar sobre la presencia y visibilidad de las mujeres en el sector tecnológico y los retos de futuro.
Esta sesión, que moderó Mª Luisa Muñoz Cobo, directora de Marketing, Comunicación y RSC de Verne Technology Group, contó también con la participación de Luisa Alli, vocal de Compromiso de la Junta Directiva de Dircom, que puso el foco sobre la necesidad de dar más visibilidad a las mujeres en distintos sectores, y resaltó el estudio Gendercom que arroja luz sobre la presencia femenina en el sector de la comunicación.
La presidenta de Dircom en C. Valenciana y R. de Murcia, Esther Castellano, indicó también que el leitmotiv de su carrera profesional se ha centrado en fomentar que las mujeres ocupen el espacio que les corresponde en su sector y fomentar la diversidad.
A lo largo de la sesión se debatieron cuestiones importantes y complejas como la falta de neutralidad de los algoritmos, mayoritariamente diseñados por hombres blancos, lo cual ha generado ya problemas en nichos tecnológicos como el del reconocimiento facial o la seguridad en el sector automovilístico.
Nuria Oliver centró su presentación en buscar las claves a esa falta de representación femenina en el sector tecnológico y las consecuencias que esto puede tener. Oliver señala que los estereotipos, el sesgo de género, la faltra de reconocimiento y visibilidad, la “brogrammer culture” y la discriminación algorítmica, son algunos de los culpables de la escasa presencia de mujeres en las carreras STEM, y por tanto, en las profesiones tecnológicas.
De hecho, Susana Duran incidió en la importancia que tiene la diversidad en las profesiones que diseñan nuestro futuro, porque pueden marcar la diferencia. Para muestra un botón: los smartphones de pantalla grande suponen una dificultad en el uso con una sola mano para mujeres con manos más pequeñas.
En este sentido, Duran recordó que hasta hace no mucho, en las pruebas de seguridad que se realizaban en el diseño de los automóviles, se utilizaban únicamente maniquís masculinos, con pesos y estaturas que la mayoría de mujeres no alcanzan, “por lo que estábamos más desprotegidas”.
Por su parte, Carolina Castillo habló de su experiencia cuando estudiaba ingeniería en la universidad, señalando que solo eran cinco mujeres en la clase, una situación que se repite en las aulas cientificotécnicas de las universidades de todo el mundo. Sin embargo, Castillo indicó que hoy las empresas tienen muy clara la existencia de este “gap de género” y que grandes multinacionales como Microsoft son “muy intencionales para fomentar la diversidad y la sostenibilidad”.
Las tres ponentes señalaron la educación como una de las claves para cambiar el futuro. Consideran que, para que las niñas no abandonen su interés por este tipo de materias de forma tan temprana, debe haber trabajo en equipo con compañeros de ambos sexos y visibilidad y representación. Dificilmente las niñas se sentirán atraidas por el mundo tecnológico si todos los estímulos que reciben les dicen que ese es un sector de hombres.
Sin embargo denunciaban que más del 95 % de los premios Nobel en estas áreas han sido concedidos a hombres y que los medios y la televisión fomentan los roles de género en series como Big Bang Theory.